Nicoletta, por ejemplo, ya deseaba hacer algo así, sólo que de un modo más libre. Una hora al día habría sido suficiente porque se medica para la depresión y ha pasado mucho tiempo de baja. El Estado ha ido pagando su depresión durante años. Y eso fue lo que escuchó: "Nicoletta Vlasak, nos consta su colaboración con varias ONG de Latinoamérica entre 2030 y 2040 además de varios viajes a África entre 2041 y 2043. Como ha cotizado poco y disfruta desde hace cinco años de una paga de viudedad, su número de la Seguridad Social ha sido elegido para la misión Campamento C: "Europa contra la lluvia ácida". Esta misión consistirá en plantar árboles durante un periodo de cinco años. Su casa será alquilada y al terminar la misión le serán devueltas las llaves."
Miguel ya había disuelto tres comprimidos de cerdo en el arroz blanco cuando su pantalla virtual se desplegó. "Nos consta un aumento de colesterol en su metabolismo en los últimos dos minutos. En vista de su hipertensión y que su peso es de 148 kilos, ¿podría confirmarnos si pretende suicidarse?". Y Miguel dijo: "¡No querrán que me suicide ahora que estoy a punto de jubilarme! Me he pasado toda la vida levantándome a las cinco, toda la vida con el camión arriba y abajo, de punta a punta de Europa, cargando y descargando..." Y añadió: "Tengo una hernia y reuma. Ahora lo que más deseo es olvidarme del camión y coger la caña de pescar." Y allí, sentado y un poco incrédulo escuchó: "Miguel Pontes, dado su sentido del humor, recordarle que su número de la Seguridad Social ha sido elegido para la misión Campamento F: "Europa devuelve la vida a los ríos.""
Cuando en la vivienda de Pietro se abrió una ventana virtual, fue Elizabeth quien hizo clic: acepto conferencia desconocida. Porque en el fondo esperaba una visita virtual de sus nietos. Entonces Elizabeth gritó: "¡Pietro!" Y Pietro empezó a escuchar, los ojos como platos. Y corroboró: "En efecto, cinco años que cobro la pensión." Y fue leyendo los documentos oficiales que firmaba digitalmente. Hasta que escuchó: "Pietro Schieder, acaba de renovar su jubilación. Es una verdadera lástima que no desee colaborar con la causa: "Europa convierte el agua en hielo. Una misión en los polos". Y al terminar ambos oyeron: "Elizabeth Toderas, tres abortos, dos hijos y una hija. Se jubila en Marzo. Le recordamos que su misión empieza el 1 de Marzo en el Campamento A: "Europa. Clonación de mujeres fértiles". Le recomendamos que se prepare físicamente durante este período."
Jacques ya esperaba una videoconferencia como ésa. Se encendía la pantalla cuando dijo: "Estoy impaciente por empezar la misión. ¡Arrestadme!" Sólo que su número no había salido elegido. Por tanto podía disfrutar de todas las ventajas de un jubilado con suerte. "Jacques Zola, sentimos comunicarle que no hemos reservado ninguna misión para usted. Hemos dejado que criticara todo lo que quisiera, porque en realidad, ya no queda gente que compre libros electrónicos. Por otro lado, su número de la Seguridad Social no ha entrado en el sorteo ya que no podemos arriesgarnos a que sus palabras alboroten el gallinero."
Y así, los mandatarios que firmaron el verdadero proyecto "Europa contra la vejez" empezaron a ver los primeros frutos: suicidios, infartos, muertes por agotamiento, muertes naturales e intentos fallidos de huida. Todo debidamente controlado por los ex-prisioneros que dirigen los proyectos. Por otro lado, la reforma ecológica que se prometía ha sido un auténtico fracaso. Aunque eso ya se sabía mucho antes de firmar. Y ahora es cuando empieza la búsqueda de planetas habitables.